Ir a conocer el planeador Perlan en el Aeropuerto de la ciudad fue el motivo principal de la visita a El Calafate.
El proyecto se había presentado el mes pasado en Buenos Aires en el Hotel The Brick, al cual pude asistir gracias a una invitación de Jeffrey Group en Argentina.
Ese fue el primer contacto que tuve y así se los contaba en el Post «Perlan II. Una misión de alto vuelo en El Calafate, Argentina»
Pasaron los días y cuando se dieron las condiciones climáticas en el sur de nuestro país, y gracias a una invitación de Airbus Group, me daban la posibilidad de ir a conocer desde el lugar de los hechos, al protagonista principal de esta magnífica historia…
Si bien ya se escribió mucho y muy bien sobre el vuelo del Miércoles pasado y se mencionaron todos los datos y los objetivos de ese día, mi intención era contarles como transcurrieron los hechos durante esa fantástica jornada.
Me acompañan ? Si es así les recomiendo que se abriguen, se coloquen la bufanda y guantes y se trasladen imaginariamente a un hotel en la ciudad de El Calafate 😉
Ese día comenzó temprano por la mañana y luego de desayunar en el hotel nos reunimos en el lobby para comenzar la jornada.
Nos pasó a buscar una combi que nos iba a llevar hasta las instalaciones del Aeroclub Lago Argentino ubicado en el Aeropuerto Internacional de El Calafate.
Abrimos la puerta e ingresamos. Era el momento de conocer al protagonista principal de esta historia…
La primera imagen que tuvimos con el planeador Perlan II tapado con unas mantas especiales.
Lo recorrí de punta a punta y pude ver, entre tanta tecnología, como el Perlan de aproximadamente 900kgs se apoyaba en una simple rueda de bicicleta rodado 20.
Como les contaba al principio, la idea de este Post era contar paso a paso como se sucedieron los hechos del día Miércoles pasado.
Entonces que mejor que presentarles a los artistas principales que iban a estar en el aire…
A la derecha Jim Payne, piloto en Jefe de la Misión y quién iba a estar sentado en el asiento de adelante del Perlan II, y el piloto Tim Gardner.
Horacio «El Cholo» Miranda, orgullo Argentino de 79 años de edad, piloto del avión remolcador, pieza fundamental de la etapa de vuelo y gran conocedor de la zona y sus vientos. Sencillamente un verdadero crack.
El helicóptero Robinson 44 de la compañía HeliUshuaia que se iba a encargar de acompañar al Perlan II hasta casi los 15.000ft.
Así como el avión remolcador de El Cholo lo iba a enganchar para hacerlo despegar y llevarlo a las alturas, esta camioneta iba a ser la encargada de enganchar al Perlan II en tierra y llevarlo hasta la cabecera de la pista.
Con la introducción de los protagonistas realizada, era hora de hacer el Briefing (reunión de trabajo que las tripulaciones mantienen antes del inicio de un vuelo) en una de las salas del Aeroclub.
Comenzaron hablando sobre los objetivos de día (recordar que son vuelos de prueba para el gran objetivo del año que viene: los 90.000ft) y los momentos importantes con la planificación de horarios.
Con la reunión finalizada, llegaba el momento de destapar al planeador 😉
Los detalles del ala derecha.
Una vez destapado el Perlan II, en primer lugar sacaban del hangar al Helicóptero R44.
Luego era el turno de «empujar» al Perlan II.
Lo llevaron hacia adelante y lo giraron apenas salieron del hangar para ponerlo de espalda a la pista.
Mientras tanto el Cholo, en soledad, ultimaba los detalles de su avión, tal como un padre hace con su hijo antes de ir al colegio…
Una vez que el motor estaba a temperatura ideal, empujaron entre dos personas para sacar al remolcador del hangar.
Cuando dieron la orden, el Cholo se subió a su avión y encendió el motor. Faltaba cada vez menos…
Mientras tanto los pilotos del Perlan II, que ya estaba enganchado a la camioneta, posaban para la foto.
Luego de posar se subieron al cockpit que, como se ve, es diminuto !
Llegaba el momento de cerrar la cabina y el proceso de presurización.
Sandra Bazgan, de investigación y desarrollo de la Fuerza Aérea Argentina y a la que la Misión Perlan designó como nexo con las instituciones, ministerios y universidades, finalizaba su tarea en el hangar y se iba a coordinar el trabajo con la torre de control del Aeropuerto.
Ya estaba todo listo para comenzar a trasladar al Perlan II a la pista. Los pilotos con la cabina presurizada ultimaban detalles.
Gracias a gestiones de la Misión con el ANAC, EANA y autoridades del Aeropuerto, gestionaron una combi a la que nos subieron para acompañar al Perlan II.
En esta imagen se puede ver el motivo por el cual el Perlan II se ponía de espalda al remolcador. Al ser remolcado y llegar a cabecera, quedaba de frente a la pista donde se iba a enganchar del avión del Cholo.
Mientras el Perlan II continuaba el rodaje a la cabecera, a nosotros nos acompañaban hasta un monte a unos 200 metros de la pista del Aeropuerto de El Calafate.
Estaba todo listo para comenzar a rodar…
El Cholo le daba potencia al motor de su avión y lentamente el Perlan II comenzaba a moverse por la pista en busca de un nuevo vuelo y los 30.000ft, objetivo de ese día.
Próximamente el Capítulo 2 y final de esta historia 🙂
Hasta la próxima !!
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19 respuestas a “Un día con el Perlan II en El Calafate. Capítulo 1”